Como yo no
soy la persona más optimista del mundo, suelo leer mucho sobre el tema. Reconozco
que ser optimista, es una gran ayuda para lograr tus objetivos.
Martin Solimán,
estudio sobre el tema y definió tres juicios que hacemos cada vez que algo nos
sucede, que determina si somos o no optimistas. Los tres juicios son:
1.
Permanencia: esta situación durara para siempre?
2.
Influencia: Esta situación afectara toda mi vida?
3. Personalización:
Es a causa de mi?
Veamos como
un optimista reacciona a algo bueno que le sucede como "me aprobaron el
proyecto"
1. Esta situación
durara para siempre? Si, seguramente me llamaran para otros proyectos también!
2. Esta situación
afectara toda mi vida? Si, voy a ser un profesional brillante y mi vida
personal también será espectacular
3. Es a
causa de mi? Si, puede crear un excelente proyecto y todo mi esfuerzo está
justificado
Veamos
ahora como el optimista reacciona frente a algo que no le gusta como "no
aceptaron el proyecto"
1. Esta situación
durara para siempre? No, ellos no aceptaron este proyecto especifico. Aprenderé
que fue mal y aprobara mi próximo proyecto.
2. Esta situación
afectara toda mi vida? No, voy a necesitar aprender un poco más sobre
proyectos, pero todavía soy un excelente profesional que puede aportar valor a
la empresa en otras ares.
3. Es a
causa de mi? no, necesito mejorar mi conocimiento en proyectos, pero sigo
siendo un profesional valioso para la
empresa.
El
pesimista, como sospecharas, responde a las preguntas en forma contraria del
optimista.
Aprendí
mucho preguntados estas preguntas en cada situación que enfrentaba, y aun
cuando a veces no me creo las respuestas como un optimista, al usar esta fórmula
meda esperanzas en ver el lado positivo de cada situación. Vale la pena
probarlo.
No comments:
Post a Comment