No llores por que se acabo, sonríe por que paso.

Cuando escuche esta frase quede atónito, porque realmente me pego en lo profundo de mi ser. Yo soy unos de los que llora por que algo se termino, en lugar de festejar que si ocurrió. Me solía enfocar en el futuro, en lo que viene, por lo que supongo, creía que perder algo era malo.

Lo triste de esto es que estaba arruinando la grata experiencia después que ocurría. Todo lo bueno quedaba minimizado por el hecho de que nos estaba allí, había pasado.  Pero pensar en la posibilidad de que no hubiese pasado, me hace pensar en lo afortunado que fui de haberlo tenido o vivido.

Espero que tu no tengas  esta misma experiencia, pero si lo tienes, aprende la lección. Algo que termina, no significa que no lo podrás recuperar en el futuro, pero aun así, si existió, te puede dejar con el sabor dulce de la felicidad de haberlo vivido, nadie puede sacarte eso, excepto tu. Tu eres el único que puede anular la experiencia.

Piensa dos veces antes de llorar por algo que ya paso, es mejor haber tenido la experiencia que nunca haber tenido la posibilidad de vivirlo. "Es mejor haber amado y haberlo perdido, que nunca haber amado del todo" . Festeja que ocurrió, disfruta tus recuerdos, recuerda tus sentimientos y se feliz que sucedió.

Escribe todas las experiencias de ese tipo que has tenido y que te hacen sonreír por que sucedieron, y deja esa lista cerca tuyo, para recordarte lo afortunado/a que eres.